El Alcalde visita las obras de mejora en el barrio de El Comendador y mantiene un encuentro con representantes de la Asociación Vecinal

El Alcalde, Marcelino Sánchez, ha visitado junto a representantes de la asociación vecinal las actuaciones que el Ayuntamiento de Úbeda está desarrollando en el barrio de El Comendador, como la adecuación de la sede vecinal, la mejora de un edificio municipal de asistencia social y cultural, además de la calle Jódar, en la que próximamente comenzarán las obras de asfaltado y mejora de la seguridad vial.

Con respecto al edificio municipal, ubicado en la calle Chiclana de la Frontera, el Alcalde ha recordado que esta intervención ha sido financiada por el Fondo Estatal de Inversión Local de 2010, con un presupuesto de 50.000 euros, para la adecuación y mejora de este edificio que se pondrá al servicio de distintas asociaciones de Úbeda “que necesitan un espacio para desarrollar sus actividades”.

Otra de las cuestiones abordadas ha sido la “necesaria” adecuación de la calle Jódar, una de las vías más importantes del barrio, que se ha convertido en una calle de acceso a la ciudad por la zona sur-oeste. El Alcalde ha explicado que próximamente comenzarán las obras, que también han sido incluidas en el programa de actuaciones que serán financias por el Gobierno de España gracias a los 2,9 millones de euros destinados a la ciudad por el ya citado Fondo Estatal de Inversión Local.

El Alcalde ha añadido que se trata de una de las prioridades fijadas por su Gobierno, con la ampliación del acceso peatonal y el aumento de la seguridad vial, teniendo en cuenta además, que esta vía se ha convertido en una entrada a la ciudad.

Las obras de la calle Jódar ya han sido adjudicadas provisionalmente y en las próximas semanas comenzarán los trabajos para acabar con el mal estado en que se encuentran los acerados y la calzada, tanto en lo referente a sus dimensiones como a su terminación superficial e iluminación.

La actuación propuesta, con una inversión aproximada de 150.000 euros, llevará a cabo una ampliación de los acerados existentes de 0.90 metros hasta los 1.5 metros, con el desplazamiento de la línea de farolas, que en la actualidad están colocadas en el espacio de paso de los acerados, para que no entorpezcan a los peatones e iluminen convenientemente la calle. En cuanto a la capacidad de tráfico, en el proyecto se ha planteado dos carriles centrales de 2.5 metros, por lo que la calle tendrá una anchura mínima de 5 metros.